sábado, 6 de agosto de 2016

Me enamoré de él


Linda Danielle Plascencia Soto 

Ya llevábamos demasiado tiempo viviendo así: mis padres discutían, mis dos hermanos también. ¡Todos eran tan problemáticos! ¡Qué difícil era ir a la escuela, esforzarse en ella, entrenar soccer, cumplir con la familia, amigos, y un sinfín de cosas, con tantos problemas! Era demasiado estrés para una persona de quince años; pero eso se acabó.

Cuando escapé de casa les avisé a mis padres. Pero no me hicieron caso. Me dio coraje, me fui.

Llegué al parque decepcionada, cansada, furiosa. Lloré bajo los árboles hasta quedarme dormida.

Desperté… no sabía dónde estaba, pero cualquier lugar era mejor que casa. Luego… lo vi, estaba cocinando. Volteó. Me hice la dormida, disfrutando el aroma.
Se sentó junto a mí silbando una canción, mientras esperaba a que abriera mis ojos. Comenzó a acariciarme. Me asusté, pero no hice nada.

Empezamos a hablar. Se llamaba Armando. Cualquier otra persona se hubiera preocupado, hubiera huido, pero yo no.

Con el tiempo empecé a sentirme segura con él, aunque era algo grosero, pero amable a la vez; era frío, pero no lo suficiente para no ser cálida con él.

Poco después descubrí que estaba en una cabaña en medio de la nada. Todas las mañanas Armando salía hacia el lago. Lo veía marcharse desde la ventana. Temía que no volviera.

No tenía su permiso para salir de la recámara. Pero no me molestaba. Era igual que estar en casa, sola, abandonada. La mejor parte del día era cuando él regresaba y cenábamos juntos.

Un día salimos. Me vendó los ojos hasta llegar al lago, y nadamos juntos.

Cuando regresamos a la cabaña estaba rodeada de policías. Yo no sabía qué pasaba. Comenzaron los disparos. Él trató de protegerme a toda costa. Los oficiales hirieron al secuestrador que había cuidado de  mí por meses. Por lo tanto, también a mí.

Me escondí para que no me llevaran. Vi cómo lo apartaban de mi lado, herido al hospital para luego trasladarlo a la cárcel.

Después de tres meses de sufrimiento, me di cuenta de que me enamoré de él.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario